Uno de los sueños favoritos de los amantes de la nanotecnología es crear pequeñas máquinas que patrullen el cuerpo, manteniendo alejado a los invasores. Un “aparato”, fabricado con moléculas, por un equipo de investigadores de Israel está cerca de hacer realidad ese sueño. Los israelíes inventaron una máquina que detecta virus al leer su genoma, y luego emiten una señal luminosa de alarma. El invento necesita un variado cóctel químico para funcionar. El objetivo es crear un método para rastrear señales virales en, por ejemplo, la sangre.
Itamar Willner, de la Universidad Hebrea de Jerusalén, y sus colegas dicen que el aparato de ADN puede generar una lectura en una hora y media, mientras que, los métodos actuales para identificar ADN de virus y bacterias, requieren muchos y complicados procesos químicos. Se aprovecha la habilidad del ADN de actuar tanto como base de datos y como catalizador parecido a las enzimas, que acelera las reacciones químicas.
Su máquina molecular es una única hebra de ADN que contiene tres segmentos. Uno (el A) es sensible a ADN viral; otro (el C) contiene instrucciones para producir una molécula de ADN catalítica o ADNzima. El tercero (B) es donde la enzima se adhiere y corta el ADNzima, liberándolo del resto de la molécula. La máquina funciona así: una molécula separada de ADN, llamada “horquilla” por su forma, se engarza al ADN del patógeno por un extremo y a la sección A, por el otro. Esto gatilla que las enzimas de la solución produzcan ADNzima codificado en la sección C, y luego los corten y liberen. Luego, una molécula conocida como hemina activa la ADNzima, que transforma otra molécula llamada luminol y hace que emita luz. Todo es automático. Y, una vez que el ADN viral enciende la maquinaria, produce y libera la ADNzima inductora de luz una y otra vez, lo que amplifica la señal. Los inventores afirman que su detector es tan sensible que, si el patógeno fuera una bolsa de azúcar y la solución, el lago Michigan, podría detectarlo.
Fuente: cidipal
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