El profesor Ron Avni, de la universidad Ben Gurion, y el presidente de la Universidad de Sapir, Ze´ev Zahor, ideólogos de la propuesta, sostienen que se podrían recaudar más de 27 millones de dólares para “causas más justas”, como por ejemplo eximir a la ciudad de Sderot de los impuestos al valor agregado.
“No es tiempo de festejos”, expresó Avni al diario Yediot Aharonot, y propuso reemplazar las “lujosas” celebraciones. “Es momento de cambiar las prioridades nacionales”, argumentó.
Hasta ahora, miles de israelíes firmaron la petición “¿Realmente lo vale?”, que será presentada a la ministra Ruhama Abraham-Balila, de Kadima, quien lidera el comité para los festejos, y al primer ministro, Ehud Olmert, a finales de febrero.
Según los planes del comité ministerial que se ocupa de las celebraciones, el 60º aniversario de la independencia incluirá un show con música, láser y efectos especiales, fiestas en estaciones públicas, espectáculos artísticos y la rehabilitación de 60 memoriales, entre otras actividades.