La mayoría de las mujeres que trabajan en el parlamento de Israel (Knesset) pueden quedar sin aumento salarial ni ascenso en 2008 como castigo por haber faltado a las actividades dedicadas al 8 de Marzo, el Día Internacional de la Mujer, escribe el periódico "Haaretz".
El director general del Knesset, Avi Balashnikov, advirtió de antemano a sus súbditos de que era obligatoria la participación de ellos en las actividades fijadas para el 4 de marzo (seminarios, presentaciones y hasta clases de autodefensa) y se puso muy bravo, al enterarse de que su disposición se había despreciado.
"Quienes decidieron dictar sus leyes aquí, han de saber que ya le dije al servicio de personal que no voy a firmar ningunas disposiciones sobre el ascenso de dichas personas durante todo el año de 2008", cita el rotativo las palabras de Balashnikov.
Fuente: RIA Novosti
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