El líder de la oposición, el diputado del Likud Benjamín Netaniahu, dijo que Israel bajo ninguna circunstancia debe permitir la división de Jerusalén.
Netaniahu afirmó que haciendo esto se daría paso libre a la formación de una nueva base terrorista en el corazón del país.
Bibi acusó al gobierno de Olmert de querer entregar la mitad de la ciudad capital a Hamás, firmando un acuerdo con la facción de los palestinos más débiles, y hacer que ésta se transforme en la Meca del terrorismo islámico.
Fuente: Flash Infolive TV