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Para esta organización de derechos humanos, no todos los humanos tienen iguales derechos, por David Mandel



¿Acaso un judío no tiene ojos? ¿Acaso no tiene manos, órganos, sentidos, afectos? ¿Si nos pinchan, acaso no sangramos? ¿Si nos envenenan acaso no morimos? (El Mercader de Venecia, Primera Escena, Acto Tercero, Shakespeare)

¿Y si nos disparan cohetes, acaso no reaccionaremos?

Oxfam es una organización internacional no gubernamental, que lucha por los derechos humanos. Hace unos días hizo un dramático pedido a los dirigentes del mundo para que presionen a Israel y hagan que ese país ponga término al bloqueo de Gaza: Es un imperativo humano que los israelíes resuman los suministros a Gaza inmediatamente. Si la comunidad internacional no actúa decisivamente, el sufrimiento humano se exacerbará.

(Oxfam, en su petición, no consideró necesario mencionar a Egipto, país que controla lo que entra y sale de Gaza a través de la frontera común que tiene con esa región.
Nota.- El control que ejerce Egipto se limita a lo que entra y sale sobre la superficie, ya que hay más de cien túneles que cruzan la frontera egipcia, por medio de los cuales los habitantes de Gaza importan todo lo que quieren, sin control ni pago de aduana, incluyendo armamentos y explosivos).

Hamás, el régimen gobernante de Gaza, no reconoce a Israel. Su razón de ser es la destrucción del Estado Judío. Tácitamente existe un estado de guerra entre Israel y Gaza, con treguas temporales generalmente no respetadas. A pesar de eso, sin que exista algún precedente histórico de ayuda a países enemigos, Israel provee de electricidad, agua, combustible, materias primas, alimentos y medicinas a un gobierno empeñado en su destrucción.

Hamás está disparando a diario andanadas de cohetes a Shderot, Ashkelon y otras ciudades, misiles que, sólo por milagro (según los religiosos) o por increíble buena suerte (según los seculares), hasta ahora no han caído en colegios y jardines de infancia. Este año, hasta principios de noviembre, los palestinos de Gaza han disparado a poblaciones israelíes 1,151 cohetes y 1,239 morteros.

Si Israel reaccionase en "forma proporcional" bombardearía las zonas residenciales desde donde disparan los cohetes. En vez de tomar esa medida, interrumpe temporalmente (lo que Oxfam llama "bloqueo") el pase de combustible y artículos no esenciales de Israel a Gaza, para presionar a Hamás a que deje de disparar cohetes.

El bloqueo temporal es completamente ineficaz y contraproducente. Hamás lo utiliza para clamar el rol de víctima, propaganda política que gente ingenua y bien intencionada, (o tal vez mal intencionada), acepta y difunde en el mundo, como es el caso de Oxfam. Las maniobras de Hamás están teniendo gran éxito. La Sra. Navi Pillay, Alta Comisionada de las Naciones Unidas para los Derechos Humanos, condenó hace unos días a Israel por "violar las leyes internacionales y humanitarias", acusando a Israel de privar a Gaza de agua y de electricidad.

Israel protestó enérgicamente contra esa falsa acusación. La electricidad de Israel continúa fluyendo a Gaza por medio de cables, sin interrupción, y el agua también. Israel, a pesar de los 170 mísiles que los palestinos dispararon de Gaza en los últimos días, permitió, hace un par de días, el pase de 33 camiones cargados de suministros. Más camiones están esperando pasar tan pronto cesen los disparos de cohetes.

La Autoridad Palestina declaró esta semana que los "sufrimientos" de Gaza son ficticios, y que el propósito de Hamás HHes incitar al público palestino y a la opinión mundial contra Israel y la Autoridad Palestina. No hay escasez de ningún producto esencial en Gaza debido a las decenas de túneles subterráneos que atraviesan la frontera con Egipto.

Israel tiene otras posibles alternativas. Entre ellas está una invasión de Gaza para destruir las fábricas de cohetes. El problema estriba en que los dirigentes israelíes han amenazado con esa acción con tanta frecuencia, que, cada vez que la vuelvan a anunciar, sólo producen bostezos, y ni sus madres les creen.

Para averiguar si los directivos de Oxfam son sinceramente idealistas, o simplemente hipócritas y parcializados, habría que hacerles las siguientes preguntas:

¿No es también un imperativo humano que Hamás cese de disparar cohetes indiscriminadamente a poblaciones civiles israelíes, que atentan contra la vida de hombres y mujeres, niños y ancianos?

¿Si los palestinos continúan disparando andanadas de cohetes, y causaran víctimas, acaso esto no exacerbaría el sufrimiento humano?

¿O, para Oxfam, los judíos de Shderot y Ashkelon tienen menos derechos humanos que los palestinos de Gaza?

Fuente: Mi Enfoque

 
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